¿Qué ver?
La capital de La Rioja va más allá del simple decorado para las catas de vino, no es solo un lugar donde poder disfrutar de una de las más reputadas denominaciones de origen españolas: es una Enópolis, una ciudad que vive por y para el vino.
Para comprobarlo basta con visitar los establecimientos que forman parte de la asociación Bodegas de Logroño.
Los buenos viticultores llevan a la botella los paisajes de su viñedo y nos hacen soñar con esas tierras.
El edificio actual de Bodegas Campo Viejo fue diseñado en 2001 para celebrar el equilibrio armónico entre enología, arquitectura y sostenibilidad.
La Casa de la Danza está situada en el centro histórico de Logroño, en la Calle Ruavieja, con acceso por Calle de San Gregorio.